domingo, 21 de noviembre de 2010

amnesia

Yo como soy mujer, paso recordando siempre. El pago del teléfono, la planta del patio, hoy es lunes y hay que trabajar, el día 33. El problema no es la memoria sino el destiempo.

Los recuerdos me andan saltando en un pie, bailando ballet, cha cha chá me enredan, tangueándome, me torean con el dato que dentro de unos días sucederá una cosa determinada, que no sé que es, que ya sucedió, que no va a pasar.
Me molestan hasta obligarme a echarlos a empujones.

Recuerdo y recuerdo hasta que ya no aguanto y voy por ese vino, y miro esa botella y lloro, por no tener un descorchador... maldita sea, quiebro la voz y la botella, me veo sin poder ya por fin acabar con estos hechos que cambian continuamente a punta de verdades, estos hechos esparcidos por el suelo, regueros de mentiras viejas y buenas como el vino. Como esta botella, que estuvo abierta brindando con ese que no olvido, por más que borracha. Cosas fermentadas ya.

No hay comentarios:

Publicar un comentario